V ENCUENTRO ANARQUISTA CONTRA EL SISTEMA TECNOINDUSTRIAL Y SU MUNDO

Durante los días 27, 28 y 29 de Mayo tendrá lugar el «V Encuentro Anarquista contra el Sistema Tecnoindustrial y su mundo». Un lugar donde encontrarnos, conocernos, debatir, difundir y afilar nuestras ideas contra la organización técnica del mundo. Pretendemos que el encuentro sea una herramienta más para combatir el sistema tecno-científico-industrial, porque pensamos que el terreno del enfrentamiento se debe concentrar en el campo del progreso tecnológico, puesto que es y será lo que trace las presentes y futuras dinámicas de la dominación sobre todos y cada uno de los aspectos de nuestra vida: sociales, políticos, económicos y ambientales. Durante la duración de las jornadas habrá un espacio para distribuidoras (aquellas que quieran montar la distribuidora en el espacio les pedimos que confirmen su presencia con antelación) y comedores 100% vegetarianos. En los próximos días difundiremos el programa completo del Encuentro.

 

Históricamente, los sistemas de dominación han aprovechado los momentos de crisis o catástrofes para transformar el mundo, para realizar una metamorfosis del mismo. En otros tiempos esta metamorfosis fue llevada a cabo cuando el capitalismo se vio amenazado por el avance de la lucha de clases o por la necesidad de cambios económicos y productivos con los que maximizar beneficios. En nuestro tiempo vemos como la tecnocracia aprovecha las emergencias ya sean energéticas, sanitarias, económicas, climáticas… para acelerar el tecno totalitarismo que supone el mundo-máquina. Se está llevando a cabo una nueva “gran transformación”, impulsada por las élites tecno-financieras, un Gran Reinicio. Reiniciar la vida en todas sus dimensiones para imponer una nueva forma de vida y un nuevo mundo bajo los imperativo de la 4º Revolución Industrial, es decir, reiniciar la vida para someterla al mundo-máquina que persigue optimizar al ser humano y todo lo vivo para convertirlo en un engranaje más de dicho mundo. Una vez artificializada y controlada la naturaleza el objetivo ahora es el ser humano.

 

Tras dos años de ´emergencia sanitaria´ y sus consecuencias (sociedad ´contactless´, privación sensorial, medicalización…) nos encontramos ahora en una nueva crisis debido a la emergencias energéticas, climáticas, etc. que supondrán, igualmente, unas consecuencias que nos dirigirán hacía el tecnototalitarismo y, en todas ellas, podemos encontrar algún formato de la guerra. Observamos entonces que las diversas formas de  emergencia son utilizadas como una nueva forma de dominación, de mantener a la población bajo los imperativos de la tecnocracia, una nueva forma de crear miedo y sumisión a la población que desposeída de libertad y autonomía aumenta su fe ciega en la salvación que le promete el sistema tecno científico. La guerra y las emergencias se convierten en nuevas formas de dominación,  tras dos años de guerra “contra el virus” que realmente ha sido una guerra contra la población. Por un lado, mediante la privación sensorial (técnica usada durante las guerras) que supusieron el confinamiento y la distancia social, por otro lado, mediante la medicalización en forma de inoculación de sueros de reprogramación celular (1) que siguen produciendo miles de heridos y asesinados y por último, supuso la destrucción de las relaciones sociales ahora mercantilizadas e informartizadas en la nueva sociedad cibernética. La actual guerra entre Ucrania-Rusia, detrás de la cual se esconde una guerra entre élites tecno finacieras (2), está provocando la aceleración de una serie de emergencias: la emergencia energética, que conduce y acelera el proyecto de la tecnocracia de la instauración de las llamadas “energías renovables” y las ciudades sostenibles, automatizadas e inteligentes dirigidas por patrones algorítmicos y la emergencia económica, tras la ruptura de la cadena de suministros que da lugar a la subida de la carestía de la vida se aceleran igualmente diversos proyectos como la biología sintética alimentaria, los transgénicos (España es el primer país europeo que tras esta crisis acepta los piensos transgénicos para animales que obviamente acabarán en nuestros cuerpos). Algo parecido a lo que sucedió tras la ´emergencia sanitaria´ en la que una parte importante de la población empezaba a aceptar que los animales producidos por la industria alimentaria fuesen modificados genéticamente para evitar que cogiesen enfermedades o transmitiesen virus. Igualmente la crisis económica “producida” por la guerra acelera el proyecto de las monedas digitales, la automatización y robotización del mundo laboral y otros como la renta básica, que posiblemente será una cartilla de racionamiento ajustada al comportamiento de cada individuo controlado en cada momento y a cada paso por la sociedad cibernética. Esta nueva forma de dominación deshace totalmente la diferencia entre la guerra y la paz, “la paz es la continuación de la guerra por otros medios” (3), las zonas de guerra y las zonas de paz se entremezclan y confunden, la guerra o la ´emergencia´ ya no es algo alejado de nuestro ambiente, como en tiempos pasados, sino que pasan a formar parte de nuestra vida cotidiana.

 

Estas ´emergencias´ junto a la climática nos conducen a una nueva forma de vida donde el comportamiento y la conducta de cada individuo quedarán reguladas en base a los imperativos sanitarios, climáticos, económicos que marque cada ´emergencia´. Unas emergencias que permitirán el asalto definitivo de la sociedad industrial a todas las esferas de la vida, permitirán una aceleración tecnológica que supere los límites conocidos hasta ahora imponiendo la forma de vida tecno industrial en el último rincón del planeta y en todo lo vivo que habita en el planeta, un control del comportamiento y de conducta que nos acerca al ´sistema de crédito´ existente en China, es decir, a una sociedad hipertecnologizada y controlada. Las nuevas formas de regular y dominar la vida en función de las diferentes emergencias irán acompañadas del proyecto de la identificación digital. Hemos visto como la llamada ´emergencia sanitaria´ ha dado lugar a la imposición del ´Green Pass´ una identificación digital (con datos personales y sanitarios) que te permitía en función de aceptar o no las nuevas regulaciones sanitarias acceder a determinados servicios. Este proyecto de identificación digital liberticida y segregacionista se extenderá al resto de emergencias, ya hemos visto como en Ucrania para recibir las ayudas dadas a la población por las consecuencias de la guerra es necesario poseer una identificación digital que incluye datos sanitarios y biométricos.

 

La sociedad cibernética que persigue la desaparición del mundo físico y la deshumanización  es la principal valedora de la identificación digital, desde el proyecto ID2020 hasta la “billetera digital” de IBM. La identificación digital supone el control absoluto de nuestras vidas ya que todos nuestros datos de comportamiento, de movimientos, biométricos, etc.. quedarán recogidos en ella. La digitalización de todas las dimensiones de la vida es un proyecto conductista con el fin de dirigir nuestro comportamiento. Las emergencias, las crisis, las guerras hacen de la vida y la muerte algo aterrador predisponiendo a la población al sueño de una victoria tecnológica en un mundo imprevisible.

 

 

HACIA EL PROYECTO TRANSHUMANISTA

 

La ´emergencia sanitaria´, y las que vienen, suponen una aceleración tecnológica y una aceleración del proyecto transhumanista. El transhumanismo pretende no solo transformar el mundo sino a los propios seres humanos, optimizarlos, mejorarlos y `aumentarlos´para adaptarlos al mundo-máquina. Mejorar al humano mediante hibridaciones con la máquina o mediante intervenciones sobre su biología, modificando y mejorando sus aptitudes físicas y cognitivas, convertir al humano en algo funcional, en una máquina.

 

Dentro de este proyecto transhumanista se ha dado un gran salto mediante los sueros de reprogramación celular, escondidos bajo el nombre de vacunas. Supone un salto hacia adelante en el nuevo paradigma biomédico que pretende controlar, y mejorar, los procesos vitales de los seres humanos mediante las nuevas técnicas para manipular y artificializar procesos básicos en los niveles molecular, celular y genético. El transhumanismo ve el cuerpo como un objeto manipulable, moldeable y mecanizable, algo funcional a sus necesidades: la ingeniería genética, xenotransplantes, medicina personalizada desarrollada a la medida del genotipo de cada persona, reprogramación de células madre, terapias génicas, regeneración de órganos in vitro, etc. abren un enorme camino a la idea de un cuerpo maleable. Este nuevo paradigma biomédico no se centra en eliminar patologías como el anterior sino que pretende controlar, administrar, modificar y redefinir nuestras propias capacidades vitales, supone un paso hacia el cuerpo transhumano, un aumento cualitativo de la capacidad de modificar nuestro metabolismo, nuestros órganos y nuestro cerebro. Por ello para nosotros, la importancia de esta nuevo paradigma biomédico, va más allá del artefacto de la “vacuna”, es el control sobre los procesos biológicos con el fin de controlarlos y artificializarlos. El objetivo como decíamos ya no es curar enfermedades, sino mejorar al ser humano, las diferentes formas de biomedicina desde las terapia génicas hasta la reprogramación celular fabrican no sólo un nuevo órgano o cuerpo sino que también fabrican una  nueva forma de entender la vida y de estar en el mundo bajo los dictados de la tecnocracia.

 

Este control y artificialización de los procesos vitales abre el camino de la eugenesia (recientemente se decodificaba el genoma completo de un feto), los avances en tecnología de secuenciación genética harán posible la intervención técnica en su organismo para moldearlo en base a los patrones de salud del capitalismo. Hoy es en base a la salud, mañana en base a cualquier otro patrón de las necesidades capitalistas que mercantilizan e instrumentalizan los cuerpos. Este descubrimiento obviamente potenciará la eugenesia que se esconde detrás de los diferentes procesos de la reproducción asistida mediante la cual se fabrican, perfeccionan y seleccionan bebés. Todo ello supone la mercantilización absoluta de la vida y sus diferentes procesos.

 

La edición de genes mediante la técnica Crispr/cas9 (que permite modificar genes con sencillez y precisión), la reprogramación celular, órganos artificiales, etc. son una parte del nuevo paradigma biomédico al que acompañarán la sensorización del cuerpo, mediante nanosensores y tecnologías ponibles que monitorizarán nuestro cuerpo y dirigirán nuestro comportamiento de nuevo en base a los patrones de salud capitalistas.

 

Si el Proyecto Genoma Humano cambió el paradigma científico y médico lo mismo ocurrirá cuando se produzca el mapeo completo del cerebro humano que es lo que pretende el proyecto estadounidense Brain, intentando descifrar todas las redes neuronales y sus funciones mediante las nuevas neurotecnologías. De nuevo, controlar los órganos y modificarlos con el fin del paradigma biomédico, ya mediante técnicas como el electromagnetismo, que se han utilizado para desactivar sistemáticamente ciertas partes del cerebro sin necesidad de intervención quirúrgica, la estimulación cerebral profunda o la optogenética, que ya ha conseguido controlar ciertos comportamientos en animales, o la posibilidad mediante electrodos de que tu cerebro maneje las prótesis mecánicas colocadas en el cuerpo. Todas estas técnicas persiguen el control del cerebro, una visión del cerebro como una máquina, como un reloj con ruedecillas y engranajes. Para ellos la mente, al igual que el cuerpo, no es más que un software que programar y desprogramar. Mecanizar al humano mediante la hibridación con la máquina uno de los objetivos transhumanistas.

 

El proyecto transhumanista se basa en la instrumentalización de las personas por la técnica,  pretende mejorarnos virtual o genéticamente de forma que cree en los individuos un nuevo estatus ontológico, rediseñando la condición humana. La digitalización de la vida en todas las dimensiones, el Internet de la cosas, las personas y los animales nos convierte en información, en datos, en algo mensurable y controlable. Si cada persona u objeto sobre la faz de la tierra transmite información continua sobre su estado, sus necesidades, sus emociones etc. convierte a lo existente sobre el mundo en algo vigilado (a tiempo real) y controlado.

 

Esta digitalización, mediante la Inteligencia artificial, el Big Data, el internet de las cosas nos lleva a la monitorización completa de nuestras vidas y a la predicción de nuestro comportamiento que será sugestionado por patrones algorítmicos. Vigilados y conducidos. Pero desde una dictadura dulce que nos hace creer libres, de la servidumbre voluntaria a la felicidad inducida, de la esclavitud a la servidumbre feliz dentro de una prisión digital, del trabajo os hará libres a la digitalización os hará libres, nunca una sociedad tan esclava, tan sumisa como la de hoy se había sentido tan libre. Vivimos en una prisión digital que da lugar a un contexto de paz colectiva, caracterizado por la total ausencia de coacciones o amenazas, “no se ve que haya reacción ni opresión… todo va a mejor en el mejor de los mundos”(4).  El proyecto cibernético es un proyecto liberticida y ecocida que modele nuestro comportamiento, nuestras emociones, nuestra experiencia y destruya el planeta mediante su necesidad insaciable de de minerales, tierras raras, energía…

 

Ahora más que nunca es el momento de rechazar la ciencia, la tecnología y el progreso que nos llevan al abismo, rechazar los postulados izquierdistas y posmodernistas que buscan la “salvación” en la técnica, rechazar la artificialización del mundo, de nuestras vidas y cuerpos, proyectar una crítica y una praxis hacia al sistema tecno científico y su mundo racional, negarnos a la mecanización y robotización de nuestras vidas hoy es más necesario que nunca ante el advenimiento de un mundo tecno totalitario. Continuar la lucha por sus múltiples caminos y los que quedan por hacer.

 

Contra toda autoridad, contra toda nocividad, por la anarquía.

 

 

 

  • Mundo Laboratorio: vacunas, pasaportes, dictadura sanitaria.
  • Walter Fomento. En la transición hacia una nueva Civilización. La confrontación militar en Ucrania..
  • Anders. Filosofia de la situación, Los libros de la catarata. 2007